La extradición del ex jefe paramilitar Salvatore Mancuso a Colombia se está enredando, ya que según el Periódico EL TIEMPO, se estableció en exclusiva con fuentes federales que el trámite se basó en una orden de captura contra el exparamilitar la cual estaba vencida; y si bien esta fue prorrogada, la defensa de Mancuso alegó que el juez no era competente para tal prórroga.

Mancuso aún tiene vigentes dos órdenes de captura, el trámite se tiene que realizar de nuevo perdiendo un tiempo clave.

La razón: su defensa no ha descartado que este sea enviado a Italia, país del que tiene ciudadanía, o pedir que se quede en Estados Unidos alegando que puede ser asesinado si regresa al país.

El periódico nacional  estableció que Colombia ya fue notificada oficialmente del error y de la solicitud de la defensa de Mancuso.

La información, confirmó con otra fuente en Colombia, se conoce en momentos en los que Mancuso ha insistido en que la Jurisdicción Especial de Paz (JEP) lo admita para hablar de civiles financiadores.

Esa jurisdicción le negó el ingreso a principios de junio, en primera instancia, bajo el argumento de que Mancuso fue combatiente de los paramilitares y que no se demostró que, antes de serlo, hubiera tenido el rol de tercero civil financiador o auspiciador de estos grupos.

Se conoció formalmente un documento en días  pasados en el que se decidió la cancelación de las órdenes de captura libradas contra Mancuso, así como la solicitud de trámite de extradición.

En efecto, la juez Luz Marina Zamora Buitrago, de Justicia y Paz, canceló las órdenes de captura número 385 y 286 del 3 de marzo de 2017, libradas contra el exjefe paramilitar como coautor del delito de secuestro extorsivo, bajo el argumento de que la pena impuesta (27 años y 8 meses) fue objeto de acumulación en el modelo de justicia ordinaria y transicional.