Opinion

Fecha de publicación: Miercoles, 20 de Noviembre de 2024 Hora: 08:45:55

Multimedia

 

 

LA PRESENTE COLUMNA NO REFLEJA EL PENSAMIENTO GENERAL DE ESTE PORTAL DE NOTICIAS, SON CONCEPTOS NETAMENTE PERSONALES DEL ESCRITOR

 

Por VICTOR ESQUIVIA POLO

 

Esa cacareada frase que lleva consigo la de ofrecer a futuro un servicio más confiable y eficiente, es la misma que en el tiempo ha sido atendida con extraordinaria disciplina y paciencia por la ciudadanía cartagenera y por sus corregimientos; los múltiples llamados de Aguas de Cartagena guiados por los anuncios de concluir la primera, la segunda, la tercera y quien sabe cuántas más fases de interconexiones de redes y empalmes, mantienen hasta ahora la capacidad de aguante de las personas.

 

Se habla de programaciones que incluyen más de 30 frentes de trabajo, justificando con ello la necesidad de suspender el servicio de agua potable de forma escalonada pero que de igual manera afecta en un 63% a la ciudad y sus corregimientos, suspensiones estas que han pasado de 6 a 8 horas, luego a 12, posteriormente a 24 y últimamente a 48, todo ello supone planes de inversiones que llevarían a “robustecer la confiabilidad del sistema de acueducto y disminuir su vulnerabilidad”, no obstante, la precariedad del servicio parece ser la misma.

 

Esto no suele ser un tema de percepción, lo que se vive y se ha estado viviendo año tras año con la promesa de Aguas de Cartagena de trabajar para mejorar el servicio no ha resultado la mejor de las experiencias pues son los hogares, las instituciones educativas, clínicas, hospitales, hoteles y escenarios deportivos quienes se han visto notoriamente afectados.

Jóvenes deportistas de la modalidad de Gimnasia Rítmica y de Trampolín que se venían preparando en el Coliseo de Combate y Gimnasia con mucha ilusión de representar a su departamento en los Juegos nacionales de la Juventud, vieron frustradas sus intenciones de dar continuidad a ese proceso frente a la necesidad de abandonar el escenario a razón de no interrumpir un plan de contingencia creado para albergar posibles damnificados por el invierno, y aunque con el llamado que se hiciese al alcalde se pudo retomar las prácticas deportivas con la coadyuvancia de los funcionarios Daniel Vargas y Campo Elías Terán, se presentó la estocada final con el cierre obligatorio del escenario debido a la última parada de Aguas de Cartagena justo a dos días que la representación bolivarense viajara a la ciudad de Armenia.

 

Esperamos que la reacción del Distrito con la instalación de los PMU y los buenos resultados mostrados para atender con prioridad el suministro de agua a la población que lo ha requerido durante el periodo de suspensión, no sea la excusa que lleve a Aguas de Cartagena a dormirse en sus propios laureles

          

 

 

.

  • Patrocinador
  • Compartir :


¿Quieres aparecer en la publicidad!?

patrocinadores